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jueves, 12 de febrero de 2009

Periodos de Abstinencia

Cuando el aletargo invade por completo tus sentidos a causa de un mundano amor, y luego te despiertan a costa de palazos cornamentales, no te queda más remedio que comprarte o crearte un condón anticoncepciones amorosas y de prevención de varias enfermedades de transmisión afanal (ETA). Gracias a dios en el mercado de la vida me tope con: ¡el mejor y más efectivo preservativo para el alma! Consta del mejor amoricida que la humanidad ha conocido; el biogenético orgullo.

El ser orgullosa me ha facturado gustosamente todo un año sin sufrimientos, sin pesares, sin lagrimas dolorosas y sobre todo sin esos retorcijones de estomago que tanta vida te quitan y tantos sueños te rompen. Sin embargo, no hay bienestar que dure 100 años, ni corazón que lo soporte, ni fricción que no desgaste y lamentablemente He perdido mi orgullo, el condón d mi alma, y lamentablemente estoy expuesta a la peligrosísima enfermedad amoril.

Durante aproximadamente un año, mantuve a régimen dietético a mi famélico ánimo enamoradizo, privándolo por completo de cualquier esbozo o amenaza de ilusión. Infortunadamente, hoy, al descuidarme por una milésima de segundo, el menesteroso inválido de mi cocho corazón se embutió por completo de un par de ojos marrones que lo miraron. Y, carajo, se inicio en mi el proceso amatorio de la cruel ilusión sin fundamentos.

La psicología dice que durante el periodo de abstinencia en la drogodependencia El paciente sufre un conjunto de reacciones físicas o corporales que ocurren cuando una persona con adicción a una sustancia deja de consumirla. En este caso obviamente yo no soy adicta a ninguna sustancia, pero les presento este ejemplo que, sinceramente es el más pertinente para una fácil explicación de mi problemita. Durante este año que pase sin ningún interés sentimental hacia cualquier ser masculino, mi cuerpo, mente y conducta reacciono de la siguiente manera:

REACCIONES CORPORALES Y SENTIMENTALES:
· Subí aproximadamente 8 kilos.
· Me corte el cabello super chiquito
· Me compre muchísima ropa
· Dos fosforitos pasionales que despache al primer contacto bucal.
· Mi cuerpo perdió la necesidad innata de ser abrasado.
· Deje de somatizar suspiros indeseables
· La sensibilidad fue asesinada por el sarcasmo
· Olvide como se siente un beso de verdad.
· Deje de necesitar protección y me volví mi propio guardaespaldas personal.

Pero, la peor y más denigrante de las reacciones Somato-sentimentales es que me ha vuelto estéril de pasiones de trascendencia (dícese de la persona que ya no puede enamorarse). Y de lo que me arrepiento profundamente es, que al momento que relegue para “siempre” mi capacidad amatoria y me incorpore el maldito orgullo amoricida, mi puto método anticoncepciones amorosas me privo de la más privativa e incomparable sensación: mi poesía.

Por eso, ahora que se han vuelto a producir en masa mis neurotransmisores serotoninos, he decidido dales rienda suelta a las palpitaciones infructuosas, a los suspiros indeseables al enrojecimiento facial y al adormecimiento para alejarme por completo de mi antiguo escudo orgulloso ya obsoleto y maltrecho por tanta fricción.
Espero que esta nueva ilusión, estos nuevos suspiros, estas caras de tarada que me obliga el inconsciente a realizar, y este nuevo brillo en los ojos que puedo ver a través del espejo cada día al despertar, sean fundamentados y no produzcan otro aborto pasional, de esos que anduve evitando durante tantísimo tiempo ya.

Espero, con todas las esperanzas de mundo, que me quiera tal y como soy, tan dura por fuera, y tan fragilita y babosa por dentro.
Besos a todos mis lectores.

Claudia C. B.
Derechos reservados.

PDT: ven como esto del amor me cambia la perspectiva del mundo?

La mujer facilona

El terror de toda chica decente.

El común denominador de los hombres, en general, es mediocre. Ya que tratándose de predisposiciones mimosas ellos prefieren lo obviamente fácil. Refiriéndome a la palabra fácil tomaré la definición de la Real Academia Española que dice: Fácil viene del latín FACILIS que manifiesta Que puede suceder con mucha probabilidad, Dicho de una persona: Que con ligereza se deja llevar del parecer de otra. Por lo tanto una mujer fácil, en el peor de los casos, una facilona busca satisfacerse satisfaciendo.

La respuesta imparcial sin entrometer a cualquier tendencia machista o feminista sería tan simple como describir a una mujer que se ofrece de manera muy provocativa con alguien sin esperar si quiera un indicio de interés formal para la próxima vez que la invite. Se le podría denominar oferta cucharita, de estas que vienen con el yogurt y son de plástico y descartables. En todos los casos la autoestima la debe tiene muy baja, a tal punto que se mete con cualquiera sin importarle si la llamara al día siguiente.

En las líneas anteriores he despotricado todo mi “afecto” hacia este tipo de damiselas. Sin embargo, he de aceptar que les guardo cierto recelo, cierta envidia ya que no me creo dotada de tales facultades grotescas. Yo, para preponderar me quedo simplemente en las picarescas miraditas regalonas que no ofrecen nada más que la simple imaginación.
He de aceptar que he sido relegada muchas veces por mujeres facilonas de mi puesto de afane formal y es por eso que me he sentido con el profundo deber moral de contar mi experiencia con esta clase de féminas para que mis lectoras estén preparadas y sepan cómo reaccionar. A continuación procederé a contarles sin muchos detalles y con un cierto tono de burla y cruel sarcasmo las dos ramas que existen en este espécimen sin moral y consecuentemente imposibilitado de denominarse ser femenino y quedarse solo en hembra.

Las mujeres facilonas se dividen en dos de acuerdo a su estatus social-cultural. No es que yo sea mala y haya ideado esta repartición sino que la escuche una vez de un tipo huanchaquero muy bestia, muy sucio, un espécimen perfecto del indigente porcentaje del género masculino coquero y por lo tanto sin muchas sinapsis, pero sin embargo muy acertado en su apreciación de la realidad. Retomando mi parcelación estas mujerzuelas, ya que es esa su verdadera identidad, se dividen en: pacharacas y chicas liberales.

Las pacharacas son aquellas chicas de las que por mas asco que puedan implantar en mi, sobrepasa mas el hecho de la lástima. Pobres, ¡pobres pacharacas! Y no porque estén escasas de recursos, sino porque su dignidad es tan ridícula e irrisoria que no tienen más remedio que afanar y ofrecerse en demasía solo para poder así lograr sentir un mínimo de afecto varonil. Y es que las pacharacas han perdido por completo el sentido de la decencia y se les puede apreciar por las siguientes características comunes:
  • La mujer facilona del tipo pacharaca es aquella que aunque haga frio usa tops y polos manga cero.
  • es aquella que tenga o no tenga chichis, las anda mostrando en todo su esplendor por los lugares menos apropiados (ya sea universidades, congresos, mercados, hospitales, colegios, etc.)
  • nunca dirán que tienen frio a menos que haya un macho cerca para abrigarlas ya que estas andas casi siempre semidesnudas.
  • Son aquellas que alzan la voz estruendosamente para hacerse notar ya que de otra manera nadie les haría caso.
  • Una pacharaca se canjea por un ceviche de luca y un jugo de 80 centimos.
  • son las típicas chicas escandalosas, súper “amigueras” y estrepitosamente disforzadas que hacen que aquellas como yo que sufrimos de la enfermedad crónica de moralidad refinada suframos de un colapso nervioso cada vez que las veamos, escuchemos o estemos cerca.


Creo que hasta ahora ya he machacado con demasía a la pobre rama pacharaca de este refrito de ensayo así que procederé a despotricar mi odio escasamente infundado a la categoría de chicas liberales. De una chica liberal existe poco que decir, ya que son aquellas que inteligentemente reciben atribuciones de su comportamiento. Ya sea un aumento de sueldo, un cambio de estatus grupal, el conocimiento de nuevas personas o en simple hecho de salir con alguien poderoso.
Las chicas liberales son aquellas que no pierden su tiempo con cualquier basurita masculina de esas que abundan en esta sociedad. Sino que busca más alto y se ofrece al mejor postor. Aquellas que no son solamente fáciles sino que van más allá de la facilidad con la que se convidan y utilizan a sus presas.


Bienaventurados chicos que se toparon con chicas liberales, si bien serán usados, aprenderán mucho y valoraran más a las chicas decentes, mis condolencias futuras a los chicos que se toparon con chicas pacharacas, ya que si bien son mucho más baratas, siempre hacen que ustedes bajen de nivel ante los ojos de aquellas que como yo somos propensas a depurar al sexo masculino por cualquier circunstancia.

Claudia C. B.
Derechos Reservados

viernes, 6 de febrero de 2009

Cuestión de besos...

Inicio estas líneas rememorando a los subyugados (inútiles vasallos) que gustosos han recibido mis besos. Lamentablemente, ninguno logro satisfacerme. No comprendo la razón por la cual los seres masculinos de este planeta que se me han acercado alguna vez y han violado mi espacio personal bucal resultaron ser una manada de imbéciles sin gusto ni sentido del aeróbico arte del besuqueo.

Tal vez ellos no sean el problema, posiblemente sea yo la que sufra de frigidez oral. Sin embargo, esta situación es cuestionable. Creo que cuando una está en perfecto e inigualable uso de sus facultades bucales, la única manera de lograr una satisfacción total es cuando se encuentra con otro ser que las posea en la misma magnitud. Otra teoría factible, que no involucrara mis admirables habilidades, seria la ineludible falta de instrucción que se les da a los varones en estas artes. Tal parece que ellos creen que mientras más se introduzcan en la infortunada mujer, sea como sea, mas machos serán, y por supuesto, yo Claudia Carranza Berrios, con mis actitudes reformadoras tan enaltecidas siento el profundo deber moral de desmentirlos y rectificarles que es todo lo contrario. o por lo menos a mi parecer, mientras más dulce, lento y delicado que sea un beso, mejor.

Conocí a un chico que no besaba; el comía, succionaba, mordía y roía a mis pobres dientes, lengua y labios. Indiscutiblemente fue desechado al primer esbozo repetitivo de tremendo padecimiento. Evocando a mis primeras etapas besuquientas adolescentes, recuerdo con mucho cariño y ternura a mi nada excelentísimo ex. ¡Oh Carepuñete! (así le puso mi amiga Nini) Cuanto tiempo ha pasado. Ya más de un año y aun consigo reír con el recuerdo de tus besos. Eran tan desagradables. Logre enseñarte un poco y lamentablemente no terminaste bien mi curso, que lastima, no tenias la potencia suficiente a pesar de tener más experiencia que yo en este campo. Tal vez no sea tu culpa y fuera que yo la que tenía todas mis energías guardadas durante mucho tiempo. Pero definitivamente me decepciono tu falta de potencial energético. Y esa fue, en pocas palabras, mi primera mala experiencia con este género pordiosero y necesitado.

Queridísimos oyentes o lectores, mi escrito tiene como único fin y afán capacitarlos para en caso de conocerme a mí o a otra muchacha con mis sentidos orales tan desbocados, puedan satisfacerla plenamente y no salga huyendo como lo he yo hecho tantísimas veces. Amaestrarlos para que no las alejen al primer contacto, es, definitivamente, tarea difícil. Ya que, son cientos de años, épocas e ideologías las que tengo que modificar en su minúsculo subconsciente. Aun así, estoy totalmente dispuesta a reformarlos pues más que un deber, me fascina hacer labor social.

Prolongare este ensayo dirigiendo a mis lectores y oyentes un consejo de acuerdo a su sexo, con la esperanza de que se vuelva un servicio comunitario femenino y pueda pasar de mano en mano. Para que unidas podamos hacerlo llegar a la mayor cantidad de hombres.

Chicas: si el primer beso que les da su enamorado no les satisface, traten una semana. Si no mejora… DEJENLO.

Chicos: las chicas practican durante toda su pubertad e incluso su niñez el arte besuquiento con su almohada, mano o peluche más cercano, tal vez será factible que ustedes hagan lo mismo. La práctica hace al maestro.

Nunca olviden que el beso es la expresión afectuosa más placentera y portentosa del universo, y jamás! Nunca! Debe verse violada por otras mañas que fueron incluidas en este arte por el revolucionario equivoco machismo.

Claudia Carranza Berrios
Derechos reservados



AVISO IMPORTANTE
Se absuelve de cualquier ultraje en este ensayo al maestro labial M. Puesto que, hasta ahora, nadie lo ha equiparado EN SU LOCUCIÓN ARTISTICA ORAL…

miércoles, 4 de febrero de 2009

Mi chico perfecto...
debe satisfacer mis 5 sentido y algo más.

Para abordar las primeras líneas de este extraño e hilarante remedo de ensayo, procederé a mi respectiva presentación: mi nombre es Claudia, y no me considero una chica tan difícil como dicen x ahí. Simplemente, los chicos que voy conociendo, hasta hoy, son una sarta de tarados, mal olientes, sin cerebro y mal hablados (refiriéndome a su prosa y los términos que utilizan) que definitivamente no inspiran ningún sentimiento en mi, más que la infortunada compasión.

Queridos chicos, y chicas, les informo que si alguno de ustedes se considera, o ha visto alguna vez, o conoce de alguien que encaje en mi posterior definición de ser humano del sexo masculino perfecto, hágame el favor de avisarme inmediatamente!!!! Empezare explicando lo esencial para que el indigente género masculino sea considerado aceptablemente "perfecto" (Claro que eso es relativo, va de acuerdo a cada chica). Pero hoy estoy hablando solo de mí, y mis tendencias.

Recomenzando, debe satisfacer mis 5 sentidos empezando por el sentido del OIDO, quiero un chico inteligente, con voz de hombre, que tenga tema de conversación, que le guste mi mismo tipo de música (blues, jazz, salsa, r&b, rock y reggae) que tenga facilidad de palabra y que siempre sepa que decir. Continuando, como segundo sentido según la importancia, es el sentido del OLFATO, ¡descartando definitivamente al muchacho si es que huele mal! ¡Chicos! está bien si les gusta su hombría, si se ven medios desaliñados, no nos molesta, pero que no se bañen, es terrible. Por favor BAÑENSE! ¿Qué les cuesta usar jabón? yo necesito abrazar a alguien y no morir asfixiada en el intento.

El Sentido del GUSTO es muy relativo, ya que no sé muy bien cómo definirlo, supongo que podría tomarlo por el hecho de que me guste o se acople a mi forma de besar. No me agrada ser babeada y soy de demorarme horas de horas en un beso largo, dulce y tibio (mi mejor tiempo ha sido de 14.33 segundos de morreo interminable).

Luego el sentido del TACTO, no quiero quedarme pegada… en los pelitos de la barba. ¡Encima raspan! ¡Adiós barba puaaaj! Luego está LA VISTA que en cuestión de parejas, importa poco. Yo solo pido que sean altos, muy altos, de tez clara, y no importa si están fofos o duritos los amare igual ya que eso es lo de menos para mí.

Si pensaron que ahí termine mi mini speach sobre lo que sería mi chico perfecto pues se equivocaron, eh aquí una lista con las otras cualidades potencialmente ineludibles para que exista la posibilidad de llegar a tener una relación conmigo:
- músico (guitarra o piano de preferencia)
- escritor (adoro los poetas, como yo)
- gracioso (incluso sarcástico)
- rebelde en su estilo de vestir, o tal vez variar y andar en terno, los rockeros son mi debilidad...
- que conozcan el club central, para poder ir algún día a comer ahí.
- adoren el café (Starbucks corazón)
- amantes de la pizza
- que no les moleste quedarse en mi casa cocinando conmigo
- amantes del cine y del básquetbol (para pasarnos la tarde entera viendo partidos de la NBA)
- que viva cerca a mi casa (California, Santa Edelmira, El Golf)
- que le gusten los sms matutinos
- que no se crean la gran cosa
- que no se echen flores a sí mismos.
- que no usen piropos baratos y de bolsillo (prefiero que me digan, disculpe señorita, no quiero molestarla pero su perfume huele muy bien)
- que no tengan fotos wachafas
- que adoren bailar
- que no se digan así mismos sexys y ardientes (puaaaj)
- que no se quieran pasar de vivos muy rápido (tómense su tiempo)
- sonrisa franca, no me gustan las poses.
- que acepte ir a ver obras teatrales y canto lirico conmigo
- que no se dejen llevar x el que dirán
- y finalmente que se hagan amigos de mi hermanito.

Creo que he olvidado algo, pero con el tiempo iré perfeccionado más este escrito. Espero encontrar algún día alguien adecuado, o x lo menos que se acerque al prototipo de perfección impuesto por mí.

Claudia C. B.
Derechos Reservados.