Powered By Blogger

martes, 1 de junio de 2010

Mi ultima noche contigo




Cariño, mi amor, esta es mi última noche contigo. No volveremos a compartir la almohada, no habrá más a quien abrazar en medio del frio. Y aunque este año ha sido un año terrible, desdichado y lleno de pesar, tú estuviste ahí todas mis noches para enjugar con tus manitos de peluche todas mis lágrimas y a limpiar con tu bufanda todos mis mocos y permitirme darte un besito con sabor a herida abierta. Mi dulce peluchito, te tengo mucho mas del tiempo que recuerdo, fuiste un regalo del cielo, suavecito, tierno y dispuesto a sonreírme todas las noches de estos últimos años. Sin embargo, ha llegado el momento de despedirnos, cariño, mi amor, mi dulce Peluso, perdóname pero he decidido quemarte.

Has sido mi paño de lágrimas este año, el año en que duplique mis llantos de toda la vida, y ya no puedo continuar cargando más mi cama con el peso de cada una de mis heridas. Disculpa por haberte hecho mi cómplice eterno, perdóname por haberte dado los besos que eran para otros, perdóname las aplastadas y las botadas al suelo, perdóname las lavadas en lavadora y perdóname el remplazo de otros en algunas noches de mi vida, perdóname haberte cargado tanto con mis penas que ahora seas un símbolo de todas mis lagrimas y vea necesario dejarte ir a ti y a tu sonrisa perpetuamente grabada en mi memoria.

En serio me duele dejarte, no creas que te estoy abandonando, solo te estoy enviando al cielo, para que montado en humo tu espíritu cargado con mis culpas llegue al infinito y sea libre como el suspiro que te regalo en esta nuestra última noche.

Para mi has sido el cuerpo físico donde dormitaba mi ángel, esperándome todas las noches para abrazarme con sueles hacerlo, como lo haces ahora que te tengo en mis brazos empillamados, tratando de explicarte porque te alejo de mis sueños de medianoche y de mis llantos nocturnos con los que estas tan familiarizado. Te digo adiós, y si lloro no es porque me arrepiento, sino porque duele sacarse el único amigo que he tenido este año, el único real, sin esperar nada a cambio, sonriendo y esperando con sus manitas despelusadas abiertas sobre una cama rosada donde esta niña poeta no duerme, solo escribe y llora a tu lado; Así como ahora que el insomnio me hace escribirte esta carta de despedida a las 6 de la mañana de un 31 de Diciembre del 2009, nuestro ultimo día juntos. Y esa es la razón por la que lloro, porque mi cama estará vacía de tu esencia para siempre, porque vendrán otros Pelusos Jr. Pero ninguno lograra ser lo que tú fuiste para mí. Mi amigo, mi amor, mi almohada, mis sueños, mi psicólogo, mi psiquiatra (Como cuando en medio de la noche metías tu bola del gorrito debajo de mi cuello y me recetabas pastillas Voltaren para el dolor de cuello que me causabas), mi pequeño diario intimo, mi hijito, mi pequeñito oso Navideño.

Quiero agradecerte cada descansada, cada acomodada de cuello, cada sonrisa en el momento exacto, tu silencio ante mis derrotas, tus abrazos ante mis triunfos, tu apoyo cuando ni mi mama me quería ver. Gracias por haber sido mi Peluso, por haber permitido que te deje sin relleno y ahora parezcas mas un trapo que un peluche, gracias por haber dejado de ser peluso hace mucho tiempo por tanta babeada y no haberte quejado cuando te he llenado de mis fluidos lagrimales. Gracias por no olvidar mis cumpleaños, por escuchar mi música, soportar mis gallos y dejarme aplastarte todas las siestas de mi vida. Ahora solo resta decirte adiós, y evitar redundar en mil gracias que nunca se me acabarían. Porque hoy es el día en que voy a quemarte y te veré consumirte, llevándote todo aquello que quisiera olvidar de este año.

Te irás al firmamento como un obsequio, para que acompañes a mi Mami Chachi en sus sueños de la otra dimensión, anda, vuela en el viento. Sé libre y ya no serás solo un peluche, serás vida que vibra y flota en el aire cargado de buenas nuevas para esta pequeña poeta que te ama y te acogió en su cama y en su corazón haciéndote un espacio en ellos que ni el peluche más caro y de mejor marca del mundo podrán rellenar. Adiós mi amor, mi Peluso, porque te amo te dejo libre en este mundo infinito, para que tu esencia se esparza al universo haciéndolo más bondadoso, reflejando lo que siempre vi en tu sonrisa, el amor puro y sincero de un ángel de peluche.

Adiós....

ENERO 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario